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Reflexiones sobre el documento de los Obispos Argentinos

Consideraciones sobre el documento "Hacia un Bicentenario en Justicia y Solidaridad 2010 – 2016” elaborado por la Iglesia, y expresadas en la disertació realizada por el Presidente de ACEP, Oscar Ensinck, en el marco de la Semana Social de Mar del Plata, encuentro organizado por la Comisió de Pastoral Social Argentina.


Creo sinceramente que “Hacia un Bicentenario en Justicia y Solidaridad 2010 – 2016”, no es un documento más, a mi humilde entender es una obra magistral eclesiástica e institucional, en un momento complicado en términos políticos, sociales y económicos.

Si le damos una rápida mirada a esta genialidad de documento, vemos por ejemplo entre sus principales título:

· Aportes para una nueva Nación

· Bicentenario

· Juntos para un nuevo proyecto de país

· Un nuevo acuerdo sobre políticas públicas

· ¿Qué estilo de liderazgo necesitamos hoy? ¿Nuevos liderazgos?

· Nuevas angustias que nos desafían

· Metas a alcanzar a la luz del Bicentenario

Cuando repaso el programa del encuentro, leo en objetivo general: “realizar aportes para un nuevo proyecto de país y contribuir a la formación y al trabajo en red de ciudadanos y dirigentes con capacidades para promover la erradicación de la pobreza y el desarrollo integral de todos, como prioridades nacionales del Bicentenario 2010 – 2016”.

¿Cómo realizamos dicho aporte y como por ende contribuimos al trabajo en red, en pos de un desarrollo integral, de modo que no sea una expresión de deseo y si sea algo real y concreto?

En rehabilitación de la política y compromiso cristiano vemos con claridad “el retroceso de la política como modo de llevar adelante la vida en comunidad, la reducción de los ciudadanos a meros consumidores o clientes, la desaparición de los puentes entre los asuntos públicos y privados son amenazas no solo a la comunidad a la que pertenecemos, sino a cada uno de nosotros, como parte de un pueblo. Es nuestra responsabilidad, entonces a partir de la rehabilitación, recobrar la vigencia de lo político en su total magnitud”.

Permanentemente insisto en diferenciar:

Nación – habitante

Mercado – consumidor / cliente

República – ciudadano

Político Socialcristiano - militante comprometido con un proyecto nacional en su concepción, popular en su inserción y humanista y cristiano en sus valores doctrinarios e ideológicos.

Hago hincapié en este punto, dado que debo pensar desde un planeamiento estratégico desde donde inicio ese camino de búsqueda de: a) proyecto de país, b) aportes, c) políticas públicas, d) liderazgo, e) angustias y f) metas.

Hace unos días la Justicia Electoral, informaba que tenemos los argentinos la módica suma de 686 partidos políticos, pero el 70 % de los ciudadanos no están afiliados a ninguno. El 33 % de ellos tienen personería jurídica nacional y 653 son de carácter distrital. El 51 % de los mismos pertenecen al PJ ( 3.823.373 afiliados), el 32,49 % a la UCR ( 2.402.447) y de todo el resto, ninguno supera la barrera del 3 % del padrón de afiliados. Electores 27.391.208, afiliados 8.448.419, no afiliados 18.942.789.

Desde el Humanismo Cristiano insistimos en que la Doctrina señala lo importante, la Ideología lo urgente y la Política lo posible.

Son tres estaciones de un proceso dinámico, que el socialcristianismo utiliza en forma de multivía y totalmente interrelacionadas para dar respuestas a la sociedad o aportar orientaciones y dar respuesta a las preguntas, los interrogantes y los problemas existentes en una sociedad.

La política como tercer elemento de las tres categorías que mencionamos, se refiere a los medios de que disponemos para que el planteamiento ideológico se haga realidad.

La política ordena y combina los medios y factores de que disponemos para llegar a la acción política, que ya es reflejo de que queremos y de lo que podemos hacer. Los fines que define la ideología se alcanzan por medio de la política. La política también refleja en la realidad el vínculo con los valores doctrinarios y con los planteamientos ideológicos, pero a diferencia de estos, que perfilan lo que queremos, la política se refiere a lo que podemos hacer y también a la forma en que lo hacemos.

Más y Mejor Democracia… no solo debe ser un slogan o título de programa sino que debemos convertirlo en una forma de vida, para que día a día los argentinos estemos orgullosos del país que forjamos.

Solo Dirigentes lo suficientemente capacitados pueden ser el nexo entre la sociedad y los partidos políticos, instituciones primordiales de la vida democrática de un país. Solo Funcionarios lo suficientemente formados, serán el nexo entre la ciudadanía y el Estado. Solo Ciudadanos lo suficientemente informados podrán exigir un país independiente, soberano y con justicia social.

Desde ACEP entendemos que la formación, la capacitación y el compromiso ciudadano, es el mejor aporte que podemos desarrollar en pos del Fortalecimiento Institucional o sea para más y mejor democracia.

Argentina necesita armar el rompecabezas institucional, político, económico y social de forma urgente:

· Reforma Política – Partidos Políticos – Presidencialismo / Parlamentarismo, Gobernabilidad y Desarrollo.

· Educación

· Medios de Comunicación

· Planificación urbana - Mega ciudades

· Políticas de estado y no de gobierno

· Políticas tecnológicas

· Liderazgo ético

Luego de haber desarrollado conceptos de la política y sus respectivas tareas, debemos dar un paso más y observar, que medios disponemos, desde donde podemos producir dicho cambio, para el armado del fino rompecabezas político, social, económico y cultural.

¿Es el poder el camino o la única posibilidad de tener influencia para cambiar la realidad en todas sus variables? Sin la articulación de los distintos poderes, no hay consensos, sin consensos NO hay proyecto de país, sin proyecto de país no hay futuro para nuestros hijos ni para nadie.

Diálogo – Reconciliación – Fortalecimiento Institucional – Federalismo – Valores – Ética, deben ser los ejes de trabajo en los cuales los militantes del Humanismo Cristiano, guiados por nuestra madre política que es la Doctrina Social de la Iglesia, e inspirados en documentos como “Rehabilitación de la Política y Compromiso Cristiano” y “Hacia un Bicentenario en Justicia y Solidaridad 2010 – 2016” debemos conscientemente y fervientemente trabajar para una sociedad de principios e ideales socialcristianos.

Lic. Oscar Luis Ensinck
www.acep.org.ar
Rosario, octubre de 2009.

¿QUÉ ES ACEP?

La Asociación Civil Estudios Populares (ACEP) es una entidad creada a principios del año 1999 en Argentina con el fin de promover los derechos y garantías consagrados en la Constitución Nacional y el respeto por los valores democráticos consagrados en la misma. Para ACEP es de especial interés el abordaje, desde una óptica humanista y cristiana, de las problemáticas del empleo, la salud, la educación, los jóvenes y la mujer.


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Asociación Civil Estudios Populares
Paraná 754-20 A.,
C.P. C1017AAP,
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  • dummy info@acep.org.ar

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